La libertad no es propiedad de nadie, sino que es un atributo de la humanidad. Se nace libre. La libertad se puede perder en el transcurso de la vida. También se puede recuperar. Cuando alguien pierde su libertad, todos perdemos algo de libertad. Por eso, cuando alguien lucha por la libertad, lo hace por la de todos. Y como es de bien nacido ser agradecido, a los republicanos españoles que lucharon en la Guerra Civil de 1936, otros pueblos les agradecen que lucharan también por su libertad. Véase la placa de la foto siguiente:
Vamos a hablar de unos hechos que en cualquier país normal se contarían en los libros de historia, aparecerían en los libros escolares, se hablaría de ellos en los medios de comunicación, se harían películas y novelas sobre ellos, jalonadas de actos y personajes heroicos, de épica, de sufrimiento, de esas epopeyas que construyen el espíritu de un pueblo. En cualquier país salvo en España si la historia tiene que ver con aquellos luchadores republicanos.
Entre 1940 y 1941 fueron deportados al campo de concentración KZ Mauthausen (y su campo "satélite" Gusen), situado a orillas del Danubio en Austria, cerca de Linz, alrededor de 7.000 republicanos españoles de los que acabada la guerra en 1939 atravesaron la frontera por los Pirineos para refugiarse en Francia, y evitar así la represión implacable que el régimen franquista ejerció con sus enemigos políticos, a quienes calificaba como "los rojos" y ejecutaba sin piedad. En Francia no tuvieron mucha suerte. La Segunda Guerra Mundial estalló inmediatamente y muchos españoles se incorporaron en tareas defensivas con Francia. Cuando el ejército de Hitler invadió el territorio francés, hizo muchos prisioneros, de diversas nacionalidades, que fueron internados en Stalags o campos de prisioneros, entre ellos muchos españoles.. Pero los nazis no trataban igual a los prisioneros de distintas nacionalidades, y el caso de los españoles era particular, porque,en cierto sentido, no eran prisioneros convencionales. Eran refugiados en otro país, y, además, eran "enemigos ideológicos" del nacionalsocialismo (los denominaban "rotspanier" o rojos españoles). Los nazis preguntaron al gobierno de Franco si querían hacerse cargo de estos prisioneros, a lo que el entonces Ministro de Exteriores, Serrano Suñer, contestó que hicieran lo que quisieran con ellos, pues no eran españoles. Ello llevó a los nazis a considerar a los "rotspanier" como "apátridas". A los apátridas no se les trataba como prisioneros de guerra. Se consideraban dentro de la "Categoría III", es decir, irrecuperables para la vida en sociedad, y se les deportaba a campos de concentración. La suerte de los prisioneros españoles estaba echada, y la responsabilidad histórica de su destino es compartida por el régimen nazi y el franquista.
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Triangulo azul con la "S" inscrita, es el distintivo que llevaban los deportados españoles en Mauthausen en la ropa. El triangulo azul significa "inmigtrante" y la S" es por Español" ("Spanier") |
Mauthausen era un campo de concentración para deportados de clase III. En él el objetivo era "el exterminio mediante el trabajo", es decir, que los presos podían permanecer con vida algunos meses, hasta que el agotamiento, la desnutrición y las enfermedades acababan con ellos. De los 7.000 españoles deportados entre 1940 y 1941, solos 2.000 fueron liberados. La mayoría murió entre 1941 y 1942, cuando las condiciones fueron las más penosas para los allí recluidos. Las condiciones empezaron a cambiar a medida que la guerra avanzaba y la necesidad de exterminar enemigos se hacía más acuciante para el régimen nazi. En particular la llegada masiva de prisioneros procedentes del frente ruso hizo que la función del campo derivara hacia el exterminio rápido. El número total de víctimas en el campo de Mauthahusen es incierto, pero se estima que fueron asesinados entre 150.000 y 300.000 seres humanos entre 1938 (en que fue abierto el campo) y 1945 (cuando fue liberado).
Es importante recordar lo que fue Mauthausen. Es particularmente importante recordarlo el dia de la liberación, el 5 de mayo. Ese día celebramos que terminó aquella barbarie. Que el mundo fue mejor después de esa fecha. Que algunos seres humanos recuperaron la libertad, y con ellos todos los demás fuimos más libres desde entonces. Los que fueron liberados se conjuraron para guardar la memoria de aquel horror y transmitirla. Su consigna fue "Perdonamos, pero no olvidaremos".
Algunos enlaces para que la memoria de los republicanos españoles deportados en Mauthausen perdure:
Memoria sobre Mauthausen (en ingles) con impresionantes documentos gráficos de la época:
http://www.zchor.org/mauthausen/mauthausen.htm
Implicación del franquismo en las deportaciones y más "amistades peligrosas"
http://www.memoriacatalunya.org/articles/art50.htm
Cuatro documentales sobre Mauthausen en español:
http://www.rebeldemule.org/foro/especiales/tema304.html
Un documental emitido en La2 de RTVE ayer 4 de mayo:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/el-documental/mauthausen/1349847/
Finalmente, muchos españoles somos descendientes de aquellos infortunados héroes injustamente olvidados en su propio país. Sabemos del sufrimiento de las familias que perdieron a algún ser querido en Mauthausen. De las viudas, los hijos desamparados. Hemos de decir que nosotros tampoco hemos olvidado, y que haremos lo posible para que su memoria perdure en las futuras generaciones. Sabemos que eso es lo que hay que hacer para que aquel horror que ellos sufrieron no se vuelva a repetir, porque aquel pueblo que olvida su propia historia está condenado a repetirla.
En memoria de aquellos republicanos españoles que lucharon y murieron por la libertad .
España, a 5 de mayo de 2012.
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